lunes, 26 de septiembre de 2011

Método Rhondell - trabajo de armonía (parte 18 de 23)

AMOR PIA

Al amor que existe entre padre e hijos, los griegos lo llamaron “amor Pía”

Dicen que no hay amor tan grande, como el que siente una madre hacia su hijo, que incluso se dejaría cortar las manos con tal de que no le pase nada a su hijo ... vamos a ver....

El amor de una madre es lo más grande, pero hay mujeres que dicen que “necesitan” tener un hijo para realizarse como madres...  pero como llora este niño ¿nunca para de llorar?, ya me tiene harta, no lo soporto, no me deja dormir, es mas, no puedo hacer nada..... ¿Amor de madre?

Crece el niño, y ya no sabemos que hacer con él, o con quien dejarlo para “poder hacer nuestras cosas”, es que no lo puedo llevar a mi partida de canasta los martes en la noche..... no lo puedo cuidar mientras estudio en la universidad..... llego tan cansada del trabajo que lo que menos quiero es tener que estarlo correteando para que cene o para que estudie..... Padres que en su afán de éxito dedican escaso tiempo a sus hijos dejando toda la responsabilidad a los abuelos o a las nanas y después pretextan que dan calidad en lugar de cantidad. Compensan las ausencias del hogar con regalos y premios. ¿Será eso lo que realmente ellos quieren y necesitan?..... Nunca tenemos tiempo para abrazarlo... claro, solo cuando hay visitas....  ¿Amor de madre?

Y gritamos “LO AMO, LO AMO”, pero hay que fijarnos como lo tratamos....

¿Cuántas veces le decimos a nuestro hijo que lo amamos? Solamente cuando se saca un 10 en sus calificaciones, o cuando limpia su cuarto, cuando se porta bien y nos agrada.... cuando es bueno....entonces si lo amamos, pero cuando es malo.... cuantas veces se nos ha escapado decirle “eres malo, ya no te quiero”. El amor de un hijo NO SE CONDICIONA, sea bueno o malo, aplicado o burro, limpio o sucio, sigue siendo nuestro hijo y como tal lo vamos a tratar. No vamos a esperar una ocasión especial para abrazarlo y decirle cuanto lo amamos.. por el simple hecho de ser nuestro hijo, por nada más. Que no importe que haga y como lo haga, ni lo que sea o deje de ser.... siempre lo vamos a amar y siempre se lo vamos a demostrar, en todo momento, en cualquier lugar.

Hay padres que no abrazan a sus hijos varones por que eso es cosa de jotos, y apenas la mamá ve que a la hija le empiezan a crecer los pechos no permiten que se le acerque a su padre......

¿Tienes hijos? ¿Les das amor? Nada mas no llega y a puro regaño....

¿Tu hijo es feliz en su casa? ¿Es libre? O se tiene que estar cuidando de no ensuciarte la sala por que hoy vas a tener visitas, o tiene que recluirse en su cuarto a jugar por que papá esta durmiendo o para no molestar. ¿Aceptas a sus amigos? O nos la pasamos clasificándolos y decidiendo con quien debe de juntarse..... entonces no aceptas sus decisiones..... no aceptas lo que hace, por que simplemente tienen que ser como tu quieres para poder quererlos........ Profesas a los 4 vientos que le haz dado libertad a tu hijo para decidir.... pero estas constantemente “sugiriéndole” que haga como dices y piensas.......

 Una madre debe guiar, supervisar, corregir, pero con amor y entendimiento.

Ahora bien ¿Cómo esta el amor con tus padres? ¿Los visitas? ¿Les das las gracias? O simplemente vas los fines de semana a hacer acto de presencia para que no digan que eres un hijo mal agradecido.... ¿Realmente somos agradecidos con nuestros padres?

Hace tiempo, cuando colaboraba en una empresa, en donde mi supervisora era una señorita, muy bien vestida, con una figura muy esbelta, larga cabellera, muy bien arreglada y perfumada... toda una princesa. Un día entro un señor a las oficinas, su aspecto era humilde, de edad avanzada, vestía un pantalón raído, un poco sucio, sombrero y una camisa a cuadros con las mangas dobladas hacia arriba. Me acerque a preguntarle en que podíamos servirle y me comento que buscaba a su hija, que si le ayudaba... el pobre señor no terminaba de decir estas palabras cuando mi supervisora corría hacia nosotros, tomo al señor del brazo bruscamente, y lo condujo hacia fuera, donde cruzaron unas palabras y después el señor se retiro, alcance a ver como sacaba un paliacate de la bolsa trasera del pantalón para secarse la boca.... Al entrar mi supervisora, yo me encontraba todavía ahí, para en la puerta, atónita por lo que había pasado y que no había entendido ..... Después me entere que ese humilde señor... era el padre de mi supervisora....¿ y tu, ahora que ya estas en la cumbre.... te avergüenzas del origen humilde de tus padres?.

¿Cuántas veces nos hemos avergonzado de nuestros padres? ¿Cuántas veces nos ha dado pena hasta que nuestros amigos y compañeros los conozca? ¿Hemos sabido ser agradecidos? ¿Amor de hijo?

Hay personas que dicen que su padre le da asco, que no soportan verlo ni escucharlo comer... come como animal.  O simplemente hay que recordar cuando éramos mas jóvenes y lo que sentíamos cuando no nos dejaban ir a una fiesta....los miramos con un gran odio y con un gran deseo de verlos muertos para que ya no interfieran en nuestras vidas. ¿Amor de hijo?

Quieres abrazar a tu madre, pero hay una barrera que te lo impide, una barrera que levantaron entre las dos... “no la puedo ver a los ojos”..... Amor Pía, amor entre padres e hijos.

No hay comentarios: